La elección del Consejo de Administración de RTVE es la primera decisión importante que el nuevo gobierno socialista tiene que abordar con mayoría parlamentaria.
RTVE ha sido, hasta ahora, uno de los juguetes preferidos del Partido Popular y es imprescindible que la gestión del ente cambie lo antes posible para que sea más libre y más democrático, no para que se convierta en el juguete de otro, aunque "el otro"sea la izquierda.
Hace algún tiempo, se aprobó un procedimiento de elección del director por medio de un concurso público pero ese procedimiento esta siendo bloqueado sistemáticamente por la mayoría de la mesa del Congreso (Cs + PP). Dado el retraso continuo, el gobierno ha optado por un procedimiento de elección provisional mientras se resuelven los "problemas legales" del concurso.
El pasar del concurso a una elección mas o menos convencional, contribuye a dar una imagen de hacer los nombramientos como siempre, mediante los apaños tradicionales entre partidos. Si a ese procedimiento forzado se le une la incontinencia verbal y la afición a apuntarse tantos del lider de Podemos que se apresuró a comunicar al candidato antes de tiempo y en forma poco adecuada, tenemos la situación actual: cuatro propuestas distintas con protestas, bastante justificadas, de los trabajadores del ente y de los partidos minoritarios.
La proverbial locuacidad de Pablo Iglesias ha tenido un papel importante en esta mala gestión, sin embargo no ha sido el único responsable. La comisión negociadora del PSOE, encabezada por el Jefe del Gabinete del Presidente del Gobierno, ha tenido su parte de responsabilidad al plantear la negociación solo con Podemos y hacerlo, según se ha visto, a la vieja usanza como un "reparto de cromos entre los dos partidos", lo que la derecha ha interpretado como un "quítate tu para ponerme yo" y más de lo mismo.
La situación es más compleja y afortunadamente, ya no valen, los compadreos de reparto de cargos entre dirigentes, hay que contar también con otros actores políticos y en este caso, además, con los trabajadores de RTVE.
El último candidato propuesto, el cuarto de la lista, parece aproximarse más a estos criterios, aunque tampoco está exento de críticas por sus actuaciones anteriores.
Entre las críticas que ha tenido esta operación hay una, que no ha sido la más extendida, pero que me parece relevante.
¿Por que se ha propuesto en todos los casos a un periodista y nunca un gestor de empresas públicas? ¿Es por una carencia de gestores de confianza o porque no se ha valorado suficientemente que RTVE es una entidad compleja, que cuesta mucho dinero y que raramente ha estado bien gestionada? El aspecto informativo es fundamental en RTVE, pero no es el único, la dirección de los servicios informativos debe ocuparla sin duda un periodista competente y de confianza, pero el ente en su conjunto, debe estar bien gestionado por un profesional competente.
Esta reflexión de la necesidad de buenos gestores empresariales públicos debe tenerse también en cuenta en un momento en que es necesario nombrar directivos en diversos entes empresariales, ADIF, RENFE, AENA, SEPI ....y en las empresas públicas estatales que todavía existen. No se debe nombrar directivos en estas empresas a responsables políticos de confianza sin el perfil adecuado, necesitan, además tener un grado de experiencia y profesionalidad suficiente. Hay que abandonar de una vez la lógica de dara cargos a los amigos leales en vez de buscar a las personas con los perfiles más adecuados.
El pasar del concurso a una elección mas o menos convencional, contribuye a dar una imagen de hacer los nombramientos como siempre, mediante los apaños tradicionales entre partidos. Si a ese procedimiento forzado se le une la incontinencia verbal y la afición a apuntarse tantos del lider de Podemos que se apresuró a comunicar al candidato antes de tiempo y en forma poco adecuada, tenemos la situación actual: cuatro propuestas distintas con protestas, bastante justificadas, de los trabajadores del ente y de los partidos minoritarios.
La proverbial locuacidad de Pablo Iglesias ha tenido un papel importante en esta mala gestión, sin embargo no ha sido el único responsable. La comisión negociadora del PSOE, encabezada por el Jefe del Gabinete del Presidente del Gobierno, ha tenido su parte de responsabilidad al plantear la negociación solo con Podemos y hacerlo, según se ha visto, a la vieja usanza como un "reparto de cromos entre los dos partidos", lo que la derecha ha interpretado como un "quítate tu para ponerme yo" y más de lo mismo.
La situación es más compleja y afortunadamente, ya no valen, los compadreos de reparto de cargos entre dirigentes, hay que contar también con otros actores políticos y en este caso, además, con los trabajadores de RTVE.
El último candidato propuesto, el cuarto de la lista, parece aproximarse más a estos criterios, aunque tampoco está exento de críticas por sus actuaciones anteriores.
Entre las críticas que ha tenido esta operación hay una, que no ha sido la más extendida, pero que me parece relevante.
¿Por que se ha propuesto en todos los casos a un periodista y nunca un gestor de empresas públicas? ¿Es por una carencia de gestores de confianza o porque no se ha valorado suficientemente que RTVE es una entidad compleja, que cuesta mucho dinero y que raramente ha estado bien gestionada? El aspecto informativo es fundamental en RTVE, pero no es el único, la dirección de los servicios informativos debe ocuparla sin duda un periodista competente y de confianza, pero el ente en su conjunto, debe estar bien gestionado por un profesional competente.
Esta reflexión de la necesidad de buenos gestores empresariales públicos debe tenerse también en cuenta en un momento en que es necesario nombrar directivos en diversos entes empresariales, ADIF, RENFE, AENA, SEPI ....y en las empresas públicas estatales que todavía existen. No se debe nombrar directivos en estas empresas a responsables políticos de confianza sin el perfil adecuado, necesitan, además tener un grado de experiencia y profesionalidad suficiente. Hay que abandonar de una vez la lógica de dara cargos a los amigos leales en vez de buscar a las personas con los perfiles más adecuados.
En tiempos de Felipe González era muy triste ver que el principal mérito para ser Gerente de un Hospital era ser un médico con carnet del PSOE. El PP hizo lo mismo. Hay que nombrar a los cargos por su valía, por sus méritos. No por su adscripción política. Nombrarlos mediante un concurso honesto.
ResponderEliminarO aprendemos de las experiencias del pasado y no cometemos los mismos errores , o volveremos a caer en el pozo dónde ha costado tento salir de él y en el que se han perdido tantas esperanzas de cambio queridas por la ciudadanía de este país. El procedimiento empleado en la primera parte ha sido penoso , parece mentira que se haya llevado así. Sabemos lo que ha pasado en el Congreso y ya es señalado adecuadamente por Alfonso, pero caer en los mismos errores, es cometer las mismas tonterías de otras veces, cuando para la elección del cargo a presidente de RTVE hay un abanico de personas con la idoneidad suficiente.
ResponderEliminarComo decía Platón : Tres facultades hay en el hombre que deben ser utilizadas; la razón que esclarece y domina, el coraje o ánimo que actúa y los sentidos que obedecen.
Dos diputados ausentes y dos torpes que se equivocan de papeleta impiden la mayoría absoluta del segundo grupo de consejeros y consiguen que no se elija el Consejo de Administración. A algunos representantes habría que mandarlos a hacer pu...
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