El resultado de las elecciones autonómicas madrileñas ha supuesto un gran triunfo para el Partido Popular y una derrota espectacular para la izquierda madrileña y específicamente para el PSOE, que ha perdido mas de una tercera parte de los escaños que tenía, 13 de 37. El sustancial incremento de Mas Madrid que ha igualado al PSOE en representantes pero le ha ganado en votos y el ligero aumento de Unidas Podemos no ha compensado el fuerte incremento del PP que se ha llevado los 26 escaños de Ciudadanos, sin representación en la cámara y una parte sustancial de los representantes perdidos por los socialistas.
La mayoría de las encuestas preelectorales coincidían en pronosticar un triunfo ajustado de la derecha y la única opción que teníamos en la izquierda era conseguir una gran movilización que activase al electorado progresista, con mayor tendencia a la abstención. La movilización se ha conseguido, la participación ha sido espectacular pero el resultado ha sido un gran triunfo del PP en todos los municipios de la Comunidad y en todos los distritos de la capital. Madrid se ha teñido completamente de azul.
El Balance electoral, diferencia de votos de cada partido sobre los resultados de 2019 en votos es, en números redondos, el siguiente:
Incremento de Participación: +393.000
PP: +900.000 PSOE: -274.000
VOX: +43.000 Cs: -500.000
Mas Madrid +139.000 Otros: -7.000
Unidas Podemos +80.000
Nulos y Blancos +12.000
Un ejercicio aproximado de posibles transferencias de votos en terminos netos, daría el siguiente resultado:
- Los votos nulos y blancos se originarían principalmente en la perdida de votos de los pequeños partidos y se complementarían con una parte de los perdidos por Cs.
- Los 393.000 nuevos votantes del 2021 se le han otorgado a PP y VOX
- Las ganancias de los partidos de izquierdas se corresponden con las perdidas del PSOE.
- Quedan otros 55.000 votos perdidos por el PSOE que necesariamente han ido a parar a la derecha, principalmente al PP.
Casi todos los análisis que tertulianos y politólogos están haciendo en estos días van en la dirección única de criticar las campañas electorales, específicamente la del PSOE
Olvidan muchos de estos "analistos" que aunque quince días de campaña, y los anteriores de precampaña, tienen mucha importancia en la formación de la opinión de los electores, los casi dos años de gestión de gobierno de Ayuso y el tipo de oposición que se ha practicado tienen un peso mucho mayor y, en este caso, la oposición real al gobierno la han hecho las plataformas y sindicatos sanitarios, los familiares de los mayores abandonados en los geriátricos mal gestionados y, a nivel político, Mas Madrid en la Asamblea de Madrid mientras Unidas Podemos y sobre todo el PSOE, mantenían un perfil de oposición bajo.
La oposición realizada por Mas Madrid, mucho mas potente que la del PSOE, puede explicar la transferencia de votos socialistas hacia este grupo, y la fuerte personalidad de Pablo Iglesias, que se ha sacrificado para que UP no desaparezca puede también explicar los 80.000 votos de incremento, pero los 55.000 electores de izquierdas del 2019 que han votado por los partidos de derechas tienen difícil explicación y habrá que esperar análisis mas profundos para encontrar una explicación. Parece como si la afirmación de una dirigente de NN.GG. sobre Ayuso, en la que indicaba que era lo malo conocido hubiera atraído a estos votantes de izquierdas que han valorado que no había nada mejor que conocer.
En cuanto a la desaparición de Ciudadanos y el mantenimiento de VOX no constituye ninguna sorpresa pues estaba previsto en todas las encuestas.
Los resultados del 4M han tenido ya consecuencias políticas en la retirada de la política de Pablo Iglesias y en la dimisión de Ángel Gabilondo y del S.G. del PSM.
Ciudadanos por su parte se sigue desangrando de forma progresiva y cada día parece más claro que pasará a ser historia en un tiempo relativamente corto.
Las elecciones andaluzas están relativamente cerca. Es fundamental que en ellas el PSOE saque unos buenos resultados. Tiene que conseguir conectar con la ciudadanía como hizo en Cataluña.
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