Blog de Alfredo20032

Comentarios, desde la izquierda, de la actualidad política y social, con referencias esporádicas a otros temas más o menos relacionados.




13 diciembre 2016

¿Donde están los alcaldes socialistas?

Llega por las redes sociales, la prensa y la TV dominante se hace poco eco de estas cosas que no tienen morbo ni dan espectáculo, que auspiciada por el papa Francisco y los Ayuntamientos de Madrid y Roma, se ha celebrado en el Vaticano a una cumbre de alcaldes europeos para tratar sobre el papel de las ciudades en la acogida a los refugiados.

En la declaración firmada se señala que:

“las ciudades deben construir puentes de solidaridad, de buena fe, de confianza y de esperanza para sanar a nuestros hermanos refugiados, a nuestros niños refugiados y sanar así también a la humanidad”.

Manuela Carmena, asistente a la cumbre apeló al concepto de “ciudades refugio”, para apuntar que las ciudades tenemos que conseguir ofrecerles posibilidades de trabajo y tener una estructura ágil para que estas personas a las que hemos rescatado puedan lograr una vida plena por sí mismos".


Dado el lamentable papel que muchos Estados Europeos, incluido España, están teniendo con los refugiados de Irak y Siria, que ha obligado a la Unión Europea a pagar una cuantiosa subvención a Turquía, ignorando el comportamiento que en materia de derechos humanos tiene el gobierno turco, para que se haga cargo de los refugiados, al mismo tiempo que impide su paso hacia Europa, supone un alivio que el papa Francisco y los alcaldes europeos adopten estas iniciativas.

Entre los 80 alcaldes asistentes, estaban cinco de las seis ciudades de mayor población de España: Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza y Málaga. Cuatro de estos municipios están gobernados por los auto-llamados alcaldes del cambio, ligados a Podemos y uno, el de Málaga, está gobernado por el PP.

¿Por que no está en esta cumbre el alcalde de Sevilla, cuarta ciudad española por población, gobernada actualmente por el PSOE?

Sería necesaria una explicación de esta ausencia, y no parece suficiente que la organización de la cumbre la compartan con el Vaticano, los Ayuntamientos de Madrid y Roma, pues en estos asuntos hay que estar por encima del color de los organizadores.

El PSOE tiene una larga tradición solidaria y tendría que haber estado presente en esta cumbre. Si se trata de un error del Ayuntamiento de Sevilla, es necesario que el propio Ayuntamiento, el  PSOE de Andalucía o la propia gestora federal intervenga y pida disculpas por esta omisión, si son otras las razones también habría que explicarlas, porque la impresión que da es que los alcaldes socialistas no están interesados en este asunto y eso, a los primeros que nos preocupa, es  a los socialistas.

Si los alcaldes españoles coordinan una iniciativa para rectificar las graves deficiencias, que en materia de acogida de refugiados está teniendo nuestro gobierno, los alcaldes socialistas, empezando por el mayor que gobernamos, Sevilla, y por la Federación Española de Municipios y Provincias, que preside el alcalde de Vigo, también socialista, deberían estar en cabeza de estas iniciativas.

Es imprescindible que se rectifique esta posición pasiva, y nuestros Ayuntamientos se incorporen de forma activa a estas iniciativas solidarias.

09 diciembre 2016

Los comuneros del siglo XXI

En 1520 irrumpió en España el nuevo rey Carlos I, llegó escoltado por una corte de Flamencos que coparon todos los cargos importantes de la corona, y venía con el interés de ser coronado emperador, tema que no interesaba nada en Castilla, pero que el pretendiente obligaba a costear mediante impuestos. Esta situación produjo la rebelión de las ciudades castellanas, que se levantaron en armas contra el nuevo rey.

La actual situación del PSOE guarda, salvando las distancias históricas, un cierto paralelismo con el movimiento comunero del siglo XVI, desde el punto de vista de que una comisión gestora, elegida después de un golpe palaciego retorciendo la legalidad del partido, tomó el poder y empezó a orientar al partido hacia unos fines que no coinciden con lo que quieren la inmensa mayoría de  sus militantes, empezando por la abstención a la candidatura de M. Rajoy.

Si los comuneros se organizaron por ciudades, los militantes socialistas nos estamos organizando en plataformas provinciales y regionales que piden un congreso con primarias previas y que ya alcanzan la cifra de 32, incluyendo Madrid que se constituye el próximo día 12, y que tienen el objetivo de restaurar la normalidad y devolver el partido a sus militantes.

El debate es, por un lado, de formas y  plazos, porque la situación de interinidad de un partido que actualmente carecede dirección, le debilita de forma considerable y no debe prolongarse demasiado tiempo, además, los administradores que dirigen la gestora son, por decirlo de forma suave, muy poco brillantes y poco considerados con sus propios militanres y votantes y con las diversas instancias del partido como el PSC o el Grupo Parlamentario.

Pero el debate es también de modelo de partido. Los acontecimientos de Octubre demostraron que tenemos un modelo agotado, en el que prima el clientelismo y las lealtades personales sobre los méritos y capacidades, los cargos son endogámicos, a veces casi hereditarios y como en la Biblia, se premia a los buenos y se castiga a los malos, siendo la gestora quien califica a unos y otros.

Las plataformas pro congreso buscamos otro modelo, en el que prime la democracia interna, se valore el mérito y la capacidad, se limiten los mandatos, se definan las incompatibilidades y los militantes sean algo más que mano de obra barata para repartir propaganda y vigilar elecciones.

En definitiva, se ha abierto de facto el proceso de primarias antes de ser convocadas, en él se perfilan dos grupos, uno liderado de momento por Susana Diaz y apoyado por barones rampantes, jarrones chinos y la vieja guardia y otro, que en principio encabezaría Pedro Sánchez, que está protagonizado por las bases y que pretende que el PSOE del Siglo XXI funcione de forma más abierta, no esté acomodado en el poder y  pueda volver a recuperar la confianza de la ciudadanía. Un PSOE que con una posición netamente de izquierdas, sea capaz de diferenciarse tanto de la demagogia populista, que muchas veces tiene Podemos, como de la vieja y la nueva derecha del PP y Cs. Un PSOE, que en el corto plazo rectifique el error histórico de haber apoyado la investidura de Rajoy, sea capaz de encabezar realmente la oposición y se convierta en la alternativa al gobierno de derechas que Esaña necesita.

La batalla se presenta dura, el aparato tiene muchos recursos y el apoyo de la mayoría de los medios de comunicación y de muchos analistos, de los que pontifican desde las tribunas mediáticas lo que les indican los que mandan, pero la situación está muy deteriorada, la gestora no tiene autoridad moral, las viejas glorias que han sacado de los museos están dando mensajes cada vez más confusos y contradictorios y, en sentido contrario, se multiplican los comunicados de  Agrupaciones, la  formación de plataformas y las intervenciones de Pedro Sánchez son apoyadas por miles de militantes mientras Susana Diaz hace el ridículo en Bruselas y acude a actos familiares de presentación de libros familiares, un hijo que escribe alabando a su padre, dándoles trascendencia de acto estatal.

En los próximos días van a ocurrir algunos acontecimientos importantes, como el acto de Pedro Sánchez en Asturias del día 10 o el mitin que Susana Diaz ha organizado en Jaén, jugando en campo propio, unos días después,  para visualizar sus apoyos. El balance de estos actos indicarán la evolución del proceso y determinarán  los siguientes pasos.

04 diciembre 2016

¿Gobernar desde el parlamento?











La Comisión Gestora que dirige el PSOE declaró, después de permitir la investidura de Rajoy, su voluntad de gobernar desde la oposición y su negativa firme a apoyar los presupuestos.

Esas intenciones se van disolviendo poco a poco como un azucarillo. El parlamento está hecho para controlar al gobierno y para hacer las leyes, pero no tiene las herramientas necesarias para gobernar aunque el gobierno sea minoritario como dejó muy claro M. Rajoy a P. Iglesias cuando, en la primera sesión de control, le respondió que solo iban a aceptar las iniciativas del parlamento cuando estuvieran obligados a ello.

En cualquier caso, para que las posiciones que se hagan desde el parlamento tengan la máxima eficacia, es necesario que exista la máxima coordinación y lealtad entre las fuerzas de la oposición. Así sucedió en las primeras mociones sobre la Ley mordaza, la LOMCE y el SMI, pero esa unidad la está demoliendo el PSOE, pactando unilateralmente con el PP en lo que algún medio ha calificado como "Gran Coalición en la sombra"

Si la oposición en su conjunto apoya una moción, coincidiendo también con los sindicatos, de proponer un SMI de 800 € y a los pocos días el PSOE acuerda con el gobierno una subida que lleva al SMI a solo 707, el resto de la oposición y los sindicatos se han quedado colgados del palo de la brocha por la falta de lealtad institucional del PSOE. Si se pretende trabajar conjuntamente con el resto de la oposición, no se puede caer en estas deslealtades jugando a dos barajas.

También se ha pactado el reparto del techo de gasto para las CC.AA., que ha subido del 0,5 al 0,6 % del PIB, lo que aunque cuantitativamente sea significativo, supone la aceptación de hecho de la propuesta de la Comisión Europea de disminuir el techo de gasto en todo el Estado en 5.000M€.

Los cambios fiscales en el impuesto de sociedades y en los impuestos especiales, más los resultados de la lucha antifraude, que el gobierno estima en  un total de 7.000 M€, están en la línea de subir los impuestos rectificando, aunque sea por un procedimiento marginal, la congelación fiscal que proponían tanto el PP como C´s.

Todo indica que a pesar de los aspavientos de A. Hernando de que el PSOE no aprobaría los presupuesto del gobierno, finalmente, argumentando que es por "responsabilidad", se acabará haciendo, incumpliendo una vez más el programa electoral que a estas alturas parece papel mojado.

Usando la metodología de "la cuenta dela vieja" que todo el mundo entiende, tenemos las siguientes cifras:

  • Ahorro necesario para alcanzar el 3,1% de déficit: 16.000 M€
  • Ingresos previstos por cambios fiscales: 7.000 M€
  • Recortes de 2017: 16.000-7.000= 9.000 M€

Hay que tener en cuenta, además, que en el año que termina, la seguridad social ha tenido un déficit de 19.200 M€ que se han cubierto con el fondo de reserva, en el que ya solo quedan 15.915 M€. Si en el 2017 se produce el mismo déficit, y la tendencia indica que será incluso mayor, faltarían 3.285 M€ que habría que sacar de una u otra forma de los presupuestos.

En conclusión, si se quiere alcanzar el déficit previsto del 3,1% y mantener las pensiones, será necesario con las cifras actuales, hacer recortes adicionales por un valor superior a 12.285 M€.

España no puede seguir recortando más. La pobreza de una buena parte de la población alcanza un nivel muy preocupante en sus distintas modalidades: pobreza energética, falta de viviendas, recurso creciente a los bancos de alimentos, necesidad de apertura de comedores escolares en vacaciones.

La pobreza de las administraciones se esta viendo físicamente en los desperfectos que han sufrido varios centros sanitarios con las primeras lluvias y, diariamente, en el deterioro de los servicios públicos fundamentales, que cada vez tienen menos personal pues no se reponen las bajas naturales en sanidad y educación; las Administraciones públicas, esas que los  emergentes Ciudadanos quieren adelgazar más todavía, están bajo mínimos para cumplir sus servicios y para comprobarlo basta con tener que hacer una gestión cualquiera en la S. Social, por ejemplo, y encontrarse con muchas mesas vacías mientras unos pocos funcionarios atienden a unos ciudadanos que tienen que hacer grandes colas, o tener que renovar el carnet de identidad para lo que hay ya varios meses de retraso 

¿Que más quieren adelgazar los emergentes C´s?

Es evidente que para empezar a salir de la pobreza y poder pagar el Estado de Bienestar, hay que subir los salarios y  disponer de más recursos públicos.

En ese sentido sea bienvenida la subida del SMI, aunque el procedimiento ha sido muy discutible por el ninguneo a los sindicatos y la falta  de lealtad con el resto de la oposición.

En cuanto  a los recursos públicos no basta con mejorar su gestión, que siempre viene bien, hay que subir los impuestos que afectan  a las rentas altas y mejorar así al mismo tiempo la distribución de la riqueza que cada vez está más desequilibrada.

En concreto, hay que subir los impuestos sobre las rentas del capital, el patrimonio y poner en marcha el impuesto sobre las transacciones financieras.

El PSOE no debe aprobar un techo de gasto a la baja, por mucho que se mejore la parte de CC.AA., ni un presupuesto que suponga más recortes sobre los de 2016.

29 noviembre 2016

No es tiempo de costuras

La brillante reaparición de Pedro Sánchez en Xirivella, con una gran asistencia de militantes y simpatizantes que ha desbordado todas las previsiones, indica que hay mucha agua en la piscina socialista y que el tiempo transcurrido desde su dimisión forzada, no ha conseguido reducir el apoyo que tenía. Lo único lamentable del acto de Xirivella es la ausencia en él de algún representante del PSC, hecho provocado seguramente por la reunión de M.Iceta con S. Diaz celebrada el día anterior. Hay que entender la posición del PSC como una medida de prudencia pues, después del golpe palaciego del 1 de octubre, el PSC ha sido el grupo más atacado y amenazado por la gestora. La regeneración del PSOE, cada vez más necesaria, necesita, ineludiblemente, de la colaboración activa del PSC que, aun respetando su prudencia, no hay que dudar se producirá.

El apoyo masivo a Pedro Sánchez no es una cuestión personal, es porque representa un nuevo concepto del PSOE y un giro a la izquierda, opciones que comparte con la inmensa mayoría de los militantes, y mientras siga en esa línea, seguirá siendo un serio candidato a la Secretaría General.

Los que formamos parte de generaciones que pasaron su infancia en una época previa a la sociedad de consumo, en la que la ropa tenía que durar y las labores de costura eran habituales, sabemos que cuando había que remendar una sabana poniéndole una pieza nueva, era necesario sanearla primero, quitando el tejido más desgastado que no se podía aprovechar. La costura que  están intentando hacer desde Andalucía no sigue esa práctica, pretenden coser sobre tejido viejo y esas puntadas duran muy poco. Para coser el partido es necesario sanearlo primero y eso solo puede hacerse después de un congreso extraordinario, que le dote de un liderazgo y una dirección fuerte,  apoyada por la militancia. La gestora no está en condiciones de coser nada y su único papel es convocar un congreso, con primarias incluidas, a la mayor brevedad posible. 

Todavía no es tiempo de costuras, es tiempo de debate, de primarias y de hacer un congreso que debe resolverse por la votación del conjunto de los afiliados y no por pasteleos ni terceras vías, impulsados por barones rampantes y jarrones chinos. Después de las primarias y del congreso ya se verá lo que hay que coser y quien es el costurero.

La hoja de ruta para conseguir la convocatoria rápida del Congreso pasa, en primer lugar, porque el Comité Federal se convoque y convoque a su vez el congreso para lo que es imprescindible que la mayoría del C.F. este por la labor de convocarlo.

El segundo termino de esta ecuación es la presión que tenemos que ejercer los militantes, mediante la repetición en distintos lugares de actos como el de Xirivella, la aprobación de resoluciones que ya están tomando distintas Agrupaciones, la creación de plataformas ad hoc por le congreso y la puesta en valor de las decenas de miles de firmas pidiendo el congreso que tienen que salir cuanto antes del congelador.


22 noviembre 2016

Vuelve Pedro Sanchez

Casi dos meses después de haber sido forzado a dimitir como S.G., Pedro Sánchez, tal y como prometió, vuelve a la carretera  para comprobar si "hay agua en la piscina" y puede volver a presentar su candidatura a las primarias para S.G. del PSOE, que la gestora, por más que se resiste, está obligada a convocar, y cuanto antes lo haga, mejor.

En este tiempo la gestora y los "barones rampantes" se han dedicado a purgar a los que ahora llaman, en sentido peyorativo, díscolos, el lenguaje no es neutral, a proferir amenazas y a cometer toda clase de torpezas, demostrando con ello que son personajes de segunda división B, por mucho que algunos presidan CC.AA.

Han iniciado también una campaña de concienciación teórica sobre lo que hay que hacer para coser el partido mientras que, como hacía Penélope en la Odisea, destejen por la noche lo que dicen tejer por el día. Buscan ganar tiempo para ver si se desinfla el apoyo a Pedro Sánchez y pueden culminar con éxito el proceso de destrucción del partido, que iniciaron con el golpe palaciego del primero de octubre.

Para esta campaña de difusión han lanzado al ruedo algunas viejas glorias del partido, que mejor estarían jubiladas y a otros compañeros veteranos, que mantienen un bien ganado prestigio de muchos años, que podrían perder si siguen admitiendo el papel de voceros intelectuales de esta gestora.

También han irrumpido, como elefante en cacharrería una pléyade de  "analistos" de esos que creen que el papel lo aguanta todo y con unos datos parciales y sesgados pretenden construir un relato con apariencia de sólido, que olvida algunos puntos fundamentales y da por dogmas indiscutibles algunos aspectos que tienen importancia relativa o incluso son meras anécdotas, como, por ejemplo, considerar que la entrevista de J.Evole fue la tumba política de P.Sanchez. Nunca se sabe si estos analistos escriben por iniciativa propia o al dictado de algún "jarrón chino" que les tuvo a sueldo en alguna otra época.

Algunos de estos análisis parten de plantear una equidistancia tópica, y empiezan por descartar a Susana Diaz y a Pedro Sánchez, porque ellos han cometido errores que han dividido al partido, como si el golpe de fuerza del 1 de octubre fuera un simple error y todos los errores fueran iguales

No se menciona en estos análisis que la militancia ha recogido, de forma espontanea, varias decenas de miles de firmas pidiendo un congreso, que la gestora quiere evitar a toda costa, y que la mayoría de esos firmantes son partidarios de que Pedro Sánchez vuelva a presentarse como S.G.

Señores analistos ¿pretenden resolver el problema del liderazgo sin tener en cuenta a los afiliados que estamos pidiendo a grandes voces que queremos decidir en primarias? Parece que si.

P. Sánchez de ha enfrentado con el aparato de las baronías mas poderosas y más caciquiles del PSOE pero, muchos militantes de esas mismas federaciones quieren un congreso.

¿No serán esos poderosos barones rampantes gigantes con pies de barro que temen ser también barridos por la fuerza de la militancia?

Hace falta un Congreso en el que Pedro, o quien represente el mismo espíritu de renovación  y giro a la izquierda que él simboliza, se enfrente a Susana Díaz o al candidato de la gestora, que parece va a representar a la vieja guardia y a la vieja cultura del PSOE.

Celebremos el Congreso y después empecemos a coser. No se puede coser y romper al mismo tiempo, como están haciendo.

Pedro Sánchez va a iniciar su ruta en pocos días, empezando por Valencia, territorio comanche de uno de los barones rampantes más significativos y luego seguirá por el resto del territorio nacional. Veamos los resultados de estos actos, recojamos las resoluciones de Agrupaciones y Comités provinciales y regionales pidiendo Congreso, acabemos la validación de las firmas. Una vez hecho todo esto hay que esperar que en el próximo C.F., que parece se va a convocar en diciembre, haya mayoría suficiente para convocar el congreso y dejarse de conferencias políticas que, en este momento, no tienen mas interés que ganar tiempo.

15 noviembre 2016

PSC vs PSOE

Una de las primeras victimas de la crisis socialista provocada por el golpe palaciego de los barones, puede ser la relación PSC-PSOE, que ha funcionado de manera eficaz desde la transición democrática.

El hecho de que en Catalunya exista el PSC, situación que no ocurre en otras nacionalidades históricas, se debe a circunstancias relacionadas con la existencia en Cataluña antes de 1978 de diversas organizaciones socialistas, incluida la  federación catalana del PSOE que se fusionaron en un partido único, el PSC, y suscribieron un protocolo de colaboración permanente con el PSOE, por el que en Catalunya el PSC tiene total autonomía mientras que a efectos federales, funciona como cualquier otra federación socialista.

Esta peculiaridad hace que los parlamentarios catalanes tengan dos dependencias del mismo nivel jerárquico, el Comité Federal del PSOE y su Consell Nacional, a diferencia de los parlamentarios de otras nacionalidades o regiones que dependen de un Comité Regional que depende jerarquicamente del C.F.

Si las discrepancias sobre al voto negativo se hubieran negociado como se propuso, acordando la abstención técnica de  once diputados o el voto en conciencia, se podría haber respetado la decisión de la abstención decidida por  el C.F., sin violentar la autonomía del PSC, pero eso habría permitido que P. Sánchez hubiera podido mantener su acta de diputado, lo que no  interesaba a los "barones demediados" que quieren rematar su golpe hasta el final.

Tendría lógica que los posibles conflictos entre el PSC y el PSOE surgieran como consecuencia de temas derivados de la situación en Catalunya, como pasó hace pocos años con la votación parlamentaria sobre el derecho a decidir, como ocurre también en otros territorios, hace poco tiempo, los parlamentarios aragoneses votaron diferente en un tema, muy sensible para Aragón, como es la gestión de las aguas del río Ebro. En algunas ocasiones se producen contradicciones entre la opinión general del partido y los intereses regionales o nacionales de algunas federaciones en algunos temas especifico, que nunca son fáciles de resolver.

Esta vez no ha sido así, las discrepancias han venido de la votación sobre la investidura y el PSC, como otros diputados de otros distritos, ha votado NO, no por ser catalanes sino por ser coherentes con lo que pensamos la inmensa mayoría de los socialistas y con lo que decía nuestro programa electoral.

Utilizar este tema para cargarse el protocolo PSC-PSOE, y destruir un esquema federal que debiera ser un ejemplo de organización a trasladar a otros ámbitos, por unos intereses personales de corto alcance, es un barbaridad política de imprevisibles consecuencias que hay que evitar por todos los medios.

Afortunadamente la primera reunión entre M. Iceta y J. Fernández ha terminado en tablas, aplazando el asunto para el dictamen de una comisión "ad calendas grecas"

Es cada vez más urgente la convocatoria inmediata de un Congreso, que elija una nueva dirección apoyada por toda la militancia socialistas, PSC incluido.

12 noviembre 2016

Reflexión después del "Trumpazo"

Lo imposible se ha hecho realidad. Nadie creía que un personaje con el curriculum de Donald Trump pudiera alcanzar la presidencia de los EE.UU., pero ha sucedido.

Trump ha sido capaz de vencer de forma aplastante, primero a una pléyade de políticos profesionales republicanos, a continuación, con bastante holgura, a una personalidad del stablishment demócrata como H. Clinton, que aunque no fuera una persona de gran popularidad, se suponía que debía ir sobrada para vencer a un personaje tan pintoresco, y a la vez tan peligroso, como el candidato republicano.

Una de las claves de la victoria de Trump puede estar, en que su discurso demagógico ha hecho un gran efecto en lo que el mismo llamó los "olvidados", los que están fuera del sistema social.

En EE.UU. y Europa vivimos en una sociedad avanzada que dispone de muchos recursos como consecuencia de los avances tecnológicos de las últimas décadas. Estos avances también han conseguido que las necesidades de mano de obra para producir mercancías de todo tipo, especialmente de los productos básicos, hayan bajado de forma considerable lo que, unido al modelo liberal en el que nos movemos, ha centrifugado a la marginalidad a muchos ciudadanos, que no pueden acceder a las ventajas de la sociedad moderna.

La victoria de Trump refleja por tanto la incapacidad de las élites políticas norteamericanas de equilibrar la distribución de la riqueza.

La situación no es muy diferente en Europa. En Francia la candidata ultra-derechista, Marie Le Pen acecha con fuerza esperando su oportunidad en las próximas elecciones presidenciales; en Alemania asoman la cabeza los neonazis, y el triunfo del Brexit en el Reino Unido está muy relacionado con el voto de protesta de la ciudadanía británica contra sus dirigentes políticos.

En España, la impotencia de la población se canaliza, afortunadamente, hacia partidos de izquierdas como Podemos que, aunque en absoluto es comparable con la demagogia de la extrema derecha, tiene una cierta vertiente demagógica y populista, que comparte con otros valores con lo que pueden mantener un relativo equilibrio. Seguramente en no mucho tiempo se  verá que tendencia acaba dominando en  ellos.

También tenemos en España una élite política, que ha gobernado en los últimos años, que no ha sido capaz de parar el incesante aumento de ciudadanos excluidos de las ventajas de la sociedad del siglo XXI.

Mayores de 45 años, jóvenes en busca de su primer empleo, con alta formación o con la mínima, parados de larga duración, mujeres y desde luego inmigrantes con o sin papeles, incrementan continuamente el ejercito de excluidos que sobreviven, en diferentes grados, con rentas muy bajas.

Por otra parte, los niveles de servicios se van degradando continuamente: hospitales con camas cerradas y con servicios bajo mínimos, mientras se eternizan las listas de espera; escuelas masificadas; y dependientes sin prestaciones, son algunos de las características más relevantes de la sociedad de la miseria que estamos construyendo. Aunque hay muchos parados con los perfiles adecuados, no hay presupuesto para contratarlo y las bajas que surgen en estos servicios se amortizan

Los trabajadores que todavía tienen empleo, están una situación laboral frágil, en la que se van perdiendo los derechos laborales adquiridos tras muchos años de lucha sindical, mientras sus jornadas laborales aumentan y sus salarios se congelan o se reducen.

Sin duda las políticas del PP tienen mucho que ver con esta situación, pero no solo ellos, también los socialistas tenemos nuestra parte de responsabilidad.

En términos conceptuales y desde el punto de vista de la izquierda el objetivo sería aparentemente sencillo, se reducirá a:

  • Repartir el trabajo entre más gente reduciendo la duración de la jornada, sin  reducir el salario en la misma proporción.
  • Mejorar el nivel de servicios de la sociedad: educación, sanidad, dependencia...., creando los puestos de trabajo necesarios.
  • Reducir el tiempo de vida útil de los trabajadores, reduciendo, o al menos manteniendo, la edad de jubilación sin detrimento del valor de las pensiones.
El problema es que todo esto tiene un costo alto que hay que pagar y no es posible, ni razonable, un recurso al endeudamiento permanente.

Para acercarnos a ese modelo ideal, sería necesario subir los ingresos vía impuestos, especialmente a las rentas más altas utilizando herramientas fiscales como los impuestos al patrimonio, a las rentas del capital a las empresas, a las transacciones comerciales, etc. 

En un país como España, perteneciente a la Unión Europea, con un déficit grande, y con la ideología liberal dominante, es muy complicado tomar medidas en la linea indicada, más bien se hace lo contrario: recortes para bajar el déficit y subvenciones con incentivos fiscales o con rebaja de las cotizaciones sociales, en definitiva bajando los ingresos para intentar atraer a los inversores y, supuestamente, crear empleo aunque sea basura.

Los socialistas no podemos conformarnos con esta situación, o limitarnos a proponer parches paliativos, es necesario que abordemos el problema en su totalidad y diseñemos con valentía, junto con los partidos socialistas europeos, políticas a corto, medio y largo plazo, que tienen que tener carácter europeo pero también nacional.

No es tarea fácil, pero hay que ponerse a ello y no lo estamos haciendo.