Blog de Alfredo20032

Comentarios, desde la izquierda, de la actualidad política y social, con referencias esporádicas a otros temas más o menos relacionados.




25 febrero 2021

España: Democracia plena pero imperfecta

 

En los últimos tiempos se está cuestionando por diversos sectores (Unidas Podemos, Independentistas catalanes, Partidos de derecha y ultraderecha) y por diferentes motivos interesados, la calidad de nuestra democracia.

Economist Intelligency Unit (EIU)  es una prestigiosa institución que lleva haciendo análisis políticos internacionales desde 1946. EUI pública anualmente un Índice de valoración (IV) de democracias que incluye a 167 países. En la edición de 2020, España obtiene una puntuación de 8,12  sobre 10, que la sitúa entre los 23 países con democracia plena existentes en el mundo.

La metodología utilizada para calcular el IV se basa en 60 indicadores que descomponen en unidades sencillas de manejar los parámetros de valoración.

Se utiliza como base un sistema de puntuación dicotómico 1-0 (1 para un sí y 0 para una respuesta no) aunque para la mayoría de los indicadores, se introduce la posibilidad de una puntuación de 0.5, para capturar "áreas grises", donde un simple sí (1) o no (0) es problemático, en estos casos el sistema de puntuación es de tres puntos, que representa un compromiso entre puntuación dicotómica y el uso de escalas más finas.

Para mayor objetividad la valoración de los indicadores se basa, siempre que es posible, en estadísticas internacionales en vez de la opinión subjetiva de  analistas expertos.

Los 60 indicadores se agrupan en cinco categorías:
  1.  Elecciones y pluralismo.
  2.  Funcionamiento del gobierno.
  3.  Participación política.
  4.  Cultura política democrática.
  5.  Libertades civiles.
La suma de los valores de los indicadores de cada categoría calcula, en una escala de 0 a 10, la puntuación de la misma. Con el promedio de las  5 categorías se obtiene el IV de cada país.

Según el valor obtenido en su IV los países se clasifican en:
  • Puntuación de 8 a 10, Democracia plena.
  • Puntuación de 6 a 8,  Democracia defectuosa.
  • Puntuación de 4 a 6,  Régimen hibrido.
  • Puntuación de 0 a 4,  Régimen autoritario.
España obtiene un IV global de 8,12 con las siguientes puntuaciones parciales:

Orden

Indice global de valoración

Elecciones y pluralismo

Funcionamiento del gobierno

Participación política

Cultura política democrática

libertades civiles

22

8,12

9,58

7,14

7,22

8,13

8,53


España tiene una  puntuación muy elevada en el sistema electoral y bastante buena en cultura política y libertades civiles. La puntuación es algo más baja en funcionamiento del gobierno y  participación política.

He resumido la metodología, que es la misma que ha utilizado el presidente del gobierno, para demostrar que no se trata de una ocurrencia a vuela pluma sino de un método de valoración muy solido que no se puede despreciar con la facilidad con que se esta haciendo.

En cualquier caso aunque plena, nuestra democracia tiene múltiples imperfecciones como corresponde a cualquier sistema democrático que siempre debe estar en continua evolución y adaptación a los nuevos tiempos.

Algunos temas, como pueden ser, entre muchos otros, la no desclasificación automática después de un cierto tiempo de los temas declarados secretos o la excesiva pena, con prisión incluida, que pueden tener los delitos de opinión tienen que ser modificados de forma urgente, aunque en  relación con la libertad de expresión, hay que señalar que la violencia callejera que se esta produciendo en algunas ciudades como protesta por el encarcelamiento de un rapero faltón, tiene mucho más que ver con una complicada situación social de la juventud de nuestro país que con la libertad de expresión.

Otros temas como la no existencia del derecho de autodeterminación que reclaman los partidos independentistas no definen a España como mas o menos democrática, son opciones de modelo de Estado que responden a una estrategia constitucional de protección de la unidad del país que es tan democrático como defender el derecho de autodeterminación que, por otra parte, la ONU solo lo considera para situaciones coloniales.

En consecuencia España es una democracia plena que es necesario mejorar continuamente y las críticas políticas que puedan hacerse no deben caer en la descalificación sistemática de nuestro país. Evitemos auto-flagelarnos continuamente.



   

18 febrero 2021

El Puzle catalán

Las elecciones  autonómicas  catalanas recientemente celebradas, han puesto de manifiesto una vez más que Cataluña es un auténtico puzle político.

En el parlament  están representados  ocho partidos mas un noveno que se ha quedado en puertas, tres nacionalistas, otros tres españolistas y dos más, PSC y ECP que tienen carácter transversal.

El gran vencedor de la jornada ha sido el PSC que con un gran candidato a la cabeza, con un mensaje de dialogo abierto a todos y sentido de país que pretende dejar a un lado la locura del independentismo unilateral y volver a convertir a Cataluña en una gran nación, integrada en España y en Europa con el máximo respeto a su personalidad y valores propios, ha conseguido doblar sus resultados de 2017 y convertirse en la primera fuerza del país, tanto en votos como en escaños.

Lamentablemente, los otros vencedores han sido los ultras, tanto los españolistas, con una entrada espectacular en el parlament de los neo fascistas de VOX con once escaños, como los ultra-nacionalistas de la CUP que han doblado su representación hasta llegar a  nueve representantes.

Los partidos nacionalistas tradicionales JXCat y ERC han mantenido sus resultados aunque intercambiando sus posiciones, la izquierda de ECP también se ha mantenido mientras que la derecha españolista Cs Y PP, se ha dado un gran batacazo, y ha quedado reducida a  una representación casi simbólica.

Las opciones reales de pactos son dos: una repetición de los nacionalistas, que, a pesar de los fracasos de las dos legislaturas anteriores sigue teniendo mucha fuerza y una opción transversal de izquierdas: PSC, ERC y ECP, que facilitaría el dialogo y la vuelta a la normalidad.

La opción nacionalista tiene grave riesgo de repetir los problemas anteriores, aunque la ausencia de personajes tan pintorescos como Torra o Puigdemont supone un alivio. De todos modos Torra y Puigdemont siguen como asesores áulicos, con una influencia  a determinar. La coalición nacionalista tendría que buscarse  algún apoyo más para alcanzar la mayoría, la opción mas probable es la CUP que, animada por sus resultados, pretende formar parte del gobierno. Si cristaliza este formato, podrían repetirse los escenarios de los últimos años, DUI y referéndum de autodeterminación incluidos. Esta coalición también exigiría la amnistía de los políticos presos que aunque no es factible, podría ser  sustituida por un indulto que mas tarde o mas pronto seguramente se concederá.

ERC quiere dar una cierta transversalidad incorporando a este supuesto gobierno a ECP, pero la incompatibilidad de los Comunes con  JxC  parece complicar esta operación.

El PSC propugna un gobierno PSC-ECP que sería  minoritario y necesitaría el apoyo externo de los 9 diputados  de la derecha españolista y la abstención de ERC y VOX pues el voto negativo del nacionalismo radical (JxC y CUP) hay que darlo por  seguro. Esta opción es muy difícil y de gestión complicada y sin la mayoría necesaria, tendría muy pocas posibiliades de sacar nada adelante.

la opción de izquierdas (PSC, ECP y ERC) tendría un carácter transversal, una mayoría amplia, y un componente de racionalidad que le ha faltado a Cataluña en los últimos años, pero tanto ERC como el PSC han rechazado un tripartito y eso parece un obstáculo casi imposible de remover.... en el primer tiempo de la legislatura, que, con toda probabilidad, será  una coalición nacionalista.

Pero en modo similar a los partidos de futbol, la legislatura podría tener un segundo tiempo en el que se podrían cambiar las estrategias si la coalición nacionalista es fiel a su propia historia y acaba reventando. 

En la legislatura anterior las opciones del grupo fuerte del constitucionalismo, Cs, eran mínimas, pues su  acercamiento a ERC era  prácticamente imposible pero el PSC con S. Illa a la cabeza tiene otras opciones y hay que confiar en que sabrá a provechar las contradicciones de los nacionalistas que sin duda se producirán.

Esperemos que dentro de unos meses se pueda tener un gobierno progresista en Cataluña.


07 febrero 2021

Panorama político 2021


El año recientemente terminado ha sido el de la pandemia del COVID 19 y el de la crisis económica y social asociada, 2021 debe ser el año de la vacuna y de la recuperación económica.

Dentro del panorama político de este nuevo año es obligado mencionar, a nivel internacional, el triunfo de Joe Biden en la presidencia americana que pone fin a una época negra de la historia mundial: la presidencia de D. Trump.

En España el año político ha empezado con la misma crispación que el año anterior. El gobierno está haciendo un gran esfuerzo por salir de la situación en la que nos encontramos, pero la oposición de derechas se dedica a la demagogia y a la descalificación permanente con métodos y argumentos  de escasa entidad política mientras otros sectores políticos minoritarios dan una de cal y otra de arena con lo que los apoyos actuales del gobierno son muy frágiles.

La apertura del curso parlamentario empezó con la aprobación del Decreto Ley sobre la administración de los fondos europeos para luchar contra la crisis económica, que  tuvo lugar con los votos contrarios de PP, Cs y los partidos catalanes, pero que, sorprendentemente, pudo aprobarse gracias a al abstención de VOX.

Las intervenciones catastrofistas de las derechas, sea en relación con el COVID, con los 140.000 Millones de los fondos europeos o con cualquier otro tema son, lamentablemente, habituales en esta legislatura, el PP ha decidido que vale todo contra el "gobierno ilegitimo" y Cs, dando una de cal y otra de arena suele seguir el mismo camino. VOX, que suele competir con el PP y Cs en la agresividad de los argumentos, ha sorprendido con la abstención, después de un discurso tan duro como acostumbra,  y ha permitido aprobar el Decreto Ley, argumentando la prioridad de los intereses de los españoles a pesar del, según ellos, lamentable gobierno que tenemos.

Si VOX ha decidido priorizar el interés de los españoles, bienvenido sea, pero seguramente hay alguna otra razón no explicitada: La indicación de la patronal.

En todo el proceso de la pandemia, los agentes  sociales, incluyendo a la patronal, están teniendo una actitud mucho mas negociadora con el gobierno  que los partidos de la oposición, los 140.000 M€  aprobados van a necesitar muchos proyectos de colaboración público privada y, en consecuencia, los empresarios no están nada interesados en ponerle trabas a estos fondos. En el futuro veremos  si VOX sigue con posturas constructivas y si se convierte, en detrimento del PP, en la voz de la patronal. En todo caso la abstención de la ultraderecha ha dejado colgados del palo de la brocha al PP y a Cs que andan buscando excusas de mal pagador para justificar su voto negativo.

En la parte positiva de este comienzo de año hay que señalar que, aunque haya habido retrasos en el suministro de alguna farmacéutica, el proceso de vacunación marcha bien en España pues se han utilizado el 90% de las vacunas recibidas, siguiendo los protocolos diseñados. Los abusos puntuales de algunos alcaldes o altos cargos han sido atajados rápidamente con los ceses y dimisiones que corresponden mientras que otros, no tan puntuales, perpetrados por gerentes de hospitales que han vacunado a quien les ha parecido oportuno saltándose a los colectivos  prioritarios, están todavía pendientes de reprobación que hay que esperar se produzca pronto. En todo caso son excepciones que confirman la regla general de buena gestión.

Entre los acontecimientos previstos para los próximos meses hay que considerar las elecciones catalanas, que se presentan complicadas, el juicio de los papeles de Barcenas que puede suponer otro clavo en el ataúd del PP.

También hay que esperar, con esperanza, la culminación en el verano del proceso de vacunación COVID 19, la normalización de la actividad laboral y el comienzo de la puesta en marcha de los planes de recuperación económicos.


27 enero 2021

Madrid sigue fallando

La primera ola de la COVID 19 puso de manifiesto algunas debilidades de los servicios públicos españoles que llevan a la conclusión de que España No funciona correctamente. Las causas están fundamentalmente en el adelgazamiento sistemático de los servicios públicos esenciales, como Sanidad, Educación y residencias geriátricas y de otros servicios generales de carácter administrativo que dificultaron la puesta en marcha rápida y eficiente de las medidas  de urgencia tomadas por el gobierno como ERTES, ayudas a PYMES y sectores más afectados por la pandemia, ingreso mínimo vital, etc.

En este contexto general Madrid, municipio y comunidad, han resultado ser  los elementos más débiles del Estado, los que peor  han funcionado. A las debilidades generales se une la tendencia al liberalismo, entendido en su peor versión y la aversión por el sector público que tienen los gobiernos autonómicos y municipal madrileños.

La gran nevada que ha caído sobre Madrid en los primeros días del mes de enero ha puesto de manifiesto estas limitaciones madrileñas. Madrid ha estado diez días paralizada por la  nieve, con los hospitales y colegios bloqueados, con las calles tapadas con miles de coches  abandonados en las vías de circunvalación, sin transporte público y recurriendo tarde y mal al apoyo del Estado. Aunque la dimensión de la nevada pueda considerarse histórica, no están justificadas las enormes limitaciones de todo tipo que ha tenido la respuesta de  la CAM.

La gestión política del gobierno de la comunidad de Madrid es lamentable desde que se formó el gobierno presidido por Isabel Diaz  Ayuso (IDA), no solo  por su ideología profundamente derechista sino también, y quizá en la situación actual mas importante, por su incapacidad, su mala gestión, sus errores técnicos y su excesiva tendencia a favorecer a los empresarios amigos.

La estrategia política de IDA, apoyada por  la dirección nacional del PP, ha conseguido convertirse en el principal ariete contra el gobierno de España dando más prioridad al enfrentamiento político que a la resolución de los problemas para lo que es imprescindible tener lealtad institucional para obtener la necesaria colaboración mínima en tiempos de crisis.

El alcalde de Madrid, que al principio de la legislatura parecía tener una posición menos agresiva, se ha ido convirtiendo progresivamente al credo de IDA, seguramente debido a su nombramiento como portavoz nacional del PP que le obliga  a defenderse de la rivalidad interna que le provoca la presidenta.

Lamentablemente, el contrapeso político a los dos gobiernos madrileños es muy escaso. Ni Más Madrid, que ganó las elecciones municipales, ni el PSOE-M que ganó las autonómicas, han sido capaces de construir una alternativa sólida y creíble que ofrezca una alternativa  a los ciudadanos. Somos muchos los que hemos pedido que se presente una moción de censura que ponga de manifiesto que hay otra forma de gobernar ambas instituciones.

La falta de liderazgo de los grupos institucionales de izquierda es clamoroso. Manuela Carmena, anterior alcaldesa de Más Madrid ni siquiera recogió su acta y el lider mas prometedor de esta formación, I. Errejón dejó la  Asamblea para dedicarse a la política nacional. En el campo socialista, Ángel Gabilondo, que seguramente hubiera sido un gran presidente de la comunidad, no ha conseguido afianzarse como lider de la oposición, y está esperando que le nombren Defensor del Pueblo, puesto en el que seguramente brillaran sus cualidades de buen gestor. Por otro lado, y las tres personas mas valiosas del grupo socialista en la  Asamblea han sido nombradas ministro/a y presidenta del senado. El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento es un personaje de gran prestigio profesional pero muy poco bagaje político y el Secretario General del PSOE madrileño, bloqueado en la Delegación del Gobierno, no está en posición de hacer labor de oposición. Las limitaciones de la pandemia COVID han dado la puntilla a cualquier iniciativa política de la oposición.

Como pasa en los grandes equipos deportivos, cuando faltan las figuras los componentes del banquillo tienen la oportunidad de demostrar sus cualidades y deben aprovecharla.

Queda mas de la mitad de la legislatura y la oposición de izquierdas en Madrid no puede seguir mirando al tendido, el PSOE, Mas Madrid y Unidas Podemos, que forman parte del gobierno de España deben ser capaces de construir una alternativa de gobierno en el Ayuntamiento y la Comunidad, con o sin moción de censura, que de una esperanza  a los madrileños, considerando además que gobiernos de Ayuso y Almeida son muy flojos y llenos de fallos y contradicciones.

En estos momentos, la Izquierda Madrileña carece de liderazgo y es imprescindible empezar a construirlo con los mimbres que tenemos que deben demostrar las razones por las que están representando a los madrileños.

13 enero 2021

¿Impeachment?¿Enmienda 25?¿Dimisión?

La  administración Trump no puede acabar de forma normal. Es necesario que termine su mandato de manera forzada, utilizando una de las tres alternativas posibles: Impeachment, aplicación de la enmienda 25 o dimisión. Cualquiera de ellas es adecuada para que el presidente Trump sea expulsado y salga con deshonor de la Casa Blanca.

El asalto al Capitolio promovido por el presidente, fue un claro intento de golpe de Estado, mas propio de una republica bananera que de un País con una democracia consolidada como se supone que es EE.UU.

No es suficiente con la salida de la presidencia por haber perdido las elecciones, tiene que ser expulsado aunque solo falten unos días para la toma de posesión de Joe  Biden y no de tiempo a culminar el proceso en ese tiempo.

No parece probable su dimisión, pues solo hay un precedente de dimisión de un presidente norteamericano, el de Richard Nixon en  Agosto de 1974 cuando el impeachment por el caso Watergate avanzaba de forma inexorable en el Congreso, y sus destitución era inevitable. 

Queda entonces la destitución por incapacidad por el vicepresidente aplicando la enmienda 25 o el impeachment promovido por el Congreso. Las dos opciones tienen las mismas consecuencias, la inhabilitación de Trump para optar a  una nueva elección en  2024, pero políticamente hay alguna diferencia  por el mayor o menor  protagonismo del partido Republicano en el proceso.

La salida de Trump es un punto importante para cerrar estos cuatro años, pero no es el último, su candidatura a la presidencia ha recibido, después de cuatro años de demagogia y desgobierno mas de 70 millones de votos, y, lo que es mucho mas grave, una buena parte de esos votantes están de acuerdo con la invasión del capitolio. Aunque el fenómeno del apoyo al populismo está extendido a muchos países, España incluido, es ahora en EE.UU. donde  está el foco mas grave.

La destitución  de Trump implica un decir hasta  aquí hemos llegado por parte de la sociedad norteamericana, pero quedaran  muchas cuestiones que resolver.

  • ¿Cómo puede integrarse y de que forma a ese sector de la población que  apoya a Trump para empezar a reducir esa enorme masa de votos populistas?
  • ¿Qué estrategia va  a seguir el partido Republicano que ha sido la  expresión política de esos votantes?¿Va a volver a la racionalidad política distanciándose  de Trump o  va  seguirle en sus desvaríos?
Si el partido Republicano se rompe, cosa que en este momento parece bastante probable, el escenario político norteamericano sería distinto por la aparición de un tercer partido que cambiaría la composición de los bloques del Congreso y del Senado y permitiría mayor juego político a la nueva  administración de Joe Biden.

En las siguientes elecciones, las intermedias de 2022, los planteamientos de estos supuestos tres partidos darían un resultado impredecible, muy distinto al bipartidismo actual.

A la administración Trump le queda un suspiro pero puede ser sonado pues Trump ha contraprogramado un mitin y se anuncian fuertes movilizaciones de sus partidarios que podrían ser violentas. La toma de posesión del presidente Biden va a ser muy complicada.

04 enero 2021

Operación Cataluña

El nombramiento del actual ministro de sanidad, Salvador Illa como candidato socialista a la presidencia de la Generalitat es un primer paso para normalizar Cataluña y devolverla a la racionalidad. Como dijo el primer secretario del PSC Miquel Iceta, no estamos nombrando un candidato socialista, estamos proponiendo un presidente para Cataluña.

Aunque las consecuencias sanitarias de la pandemia provocada por el COVID 19, hayan sido terribles en España y en todo el planeta, la gestión realizada por el ministro Illa ha permitido, en una situación muy complicada, reducir su impacto que podría haber sido mucho mas grave. Esa actuación le ha dado un gran prestigio que le convierte en el candidato idóneo para optar a la presidencia catalana.

El procés catalán empezó en 2012 con el pacto de gobernabilidad firmado por Artur Mas y Oriol Junqueras en el que se comprometían a la convocatoria de un referéndum de autodeterminación en Cataluña. 

Las iniciativas políticas y judiciales a que han dado lugar el procés, combinado con la llegada a la presidencia catalana del president Puigdemont, uno de los peores dirigentes que ha tenido Cataluña, solo superado por su sucesor Quim Torra, cuando  huyó a Bélgica para evitar ser procesado. Q. Torra ha alcanzado tales cotas de incapacidad que ha conseguido hacer retroceder Cataluña tanto desde el punto de vista económico como del social, hasta un nivel impensable hace poco tiempo .

Cataluña necesita un cambio político profundo que requiere, en primer lugar, sustituir a los presidentes incompetentes que ha tenido en estos últimos años; en segundo lugar superar el sectarismo separatista, incomprensible en el siglo XXI en el marco de una sociedad avanzada como la española, que ha orientado su acción política de los últimos años; y en tercer lugar, en el contexto post COVID 19, Cataluña tiene que tener un gobierno que le permita ofrecer sus grandes capacidades con sus mejores esfuerzos para su recuperación económica y política, en colaboración con el gobierno de España y La Unión Europea.

Salvador Illa es la solución adecuada en este momento. Su moderación y su talante negociador complementa la estrategia política del partido socialista que respetando profundamente los sentimientos catalanistas de la población, los compatibiliza con la defensa del Estado español dentro de la Unión Europea. El conjunto de estos elementos constituyen un inmenso capital político que puede y debe contribuir de forma decisiva a la recuperación política, social y económica de Cataluña. Frente al independentismo unilateral, los socialistas defendemos una organización del Estado de corte federal que respeta las características de todos los territorios que lo componen. No es tarea fácil pero hay que empezar a transitar esa vía.

El escenario político preelectoral en Cataluña está muy abierto y posibilita distintas alternativas. Las  encuestas anteriores a la proclamación de  S. Illa como candidato, dan como favorito a ERC, un descenso pronunciado de JxCat, el hundimiento relativo de Ciudadanos y un notable ascenso del PSC. La posible aritmética post electoral, combinada con la coincidencia programática, puede tener como resultado un gobierno encabezado por ERC en alianza con el resto de partidos independentistas o, y esta es la diferencia, un gobierno transversal también encabezado por ERC, pero apoyado por el PSC y Cataluña en Común.

La irrupción del candidato socialista debe potenciar la segunda alternativa que cuenta además con la opción de que sea el PSC quien presida el futuro gobierno, si el electorado apoya suficientemente la candidatura de S. Illa.

Como antecedente al procés de Cataluña hay que recordar al Plan Ibarretxe, propuesta de reforma del estatuto vasco, aprobada por el parlamento vasco en diciembre de 2004. 

El plan Ibarretxe, aunque tramitado formalmente como reforma del estatuto de autonomía, incluía entre otras prescripciones, la configuración de Euskadi como Estado Libre  Asociado, en un esquema confederal con el Estado Español y la convocatoria de un referéndum de autodeterminación. El plan Ibarretxe fue rechazado por amplia mayoría en el congreso de los diputados en febrero de 2005.

Posteriormente, en las elecciones autonómicas vascas de 2009, que el PNV perdió, se constituyó el gobierno socialista de Patxi López con apoyo externo del PP, que enterró definitivamente el plan y, junto con la disolución de ETA, contribuyó a abrir un nuevo camino para Euskadi.

No es previsible una solución PSC-PP para Cataluña en 2021 pues las circunstancias son muy diferentes: El PP no es el único representante de la derecha y la predisposición de los populares en 2021 en Cataluña no es la misma que la que tuvieron en 2009 en Euskadi, pero la aritmética parlamentaria podría poner en valor la posibilidad de que tanto PP como Cs apoyasen directamente o indirectamente un posible gobierno del PSC- Cataluña en Común en el que no estuviera ningun partido independentista. Es una posible alternativa a un tripartito, difícil, pues necesita que los partidos independentistas no sumen mayoría absoluta, pero no imposible.

Sea cual sea el resultado final de las elecciones, el PSC con S. Illa a la cabeza, debe tener un papel fundamental.


28 diciembre 2020

El Rey se queda corto

El discurso navideño del Rey es, seguramente, la comunicación mas importante que hace el monarca cada año. En ella en se espera  que haga balance de los asuntos mas importantes y tome posición sobre ellos.

Este año 2020 la pandemia del COVID 19 tenía que tener especial protagonismo y así ha sido. El Rey ha mostrado su solidaridad y su apoyo a la ciudadanía por las consecuencias de la epidemia y ha transmitido su esperanza de que en el próximo año España recupere su normalidad, tanto desde el punto de vista sanitario como del social.

Hasta ahí el discurso ha sido totalmente correcto en lo fundamental, aunque hay algunos detalles a los que podría haber incidido con mayor énfasis.

Sin embargo hay al menos otros dos temas importantes en los que se esperaba que el monarca entrara: la situación de su padre, el Rey emérito y la carta de los militares retirados pidiendo, casi directamente, que Felipe VI, como comandante supremo de las FF.AA. encabezase un golpe de estado contra el gobierno progresista.

En relación con la situación de J. Carlos I el silencio del Rey, o la sutil mención entre líneas, solo para oídos finos, que parece que casi todo el mundo ha detectado, pone de manifiesto la estrategia diseñada por la Casa Real en este asunto:

  • Las comisiones o regalos recibidos antes de la abdicación no  pueden ser delictivas pues están amparada por la inviolabilidad, entendida en sentido absoluto, del ex monarca.
  • Los fondos recibidos después de 2014 se limitan a una donación  de un magnate mexicano que Juan Carlos I ya ha declarado con el recargo y multa correspondientes ya pagados.
  • En consecuencia  no hay nada más que considerar y solo resta esperar que las investigaciones en curso no encuentren nada mas. Hay que suponer que los abogados del  Rey han sido lo suficiente  hábiles para que no haya ninguna sorpresa.
En todo caso las explicaciones que haya que dar corresponden mas al emérito que  a Felipe VI, y las darán, si así lo deciden, en el momento que consideren mas oportuno, que probablemente será tras una prudente espera hasta que la fiscalía archive el caso, momento en el que se decidirá también la vuelta del ex-Rey a España y su lugar de residencia. Deben considerar que el paso del tiempo minimizará el impacto de esta decisión.

Mas grave es la falta de respuesta pública de Felipe VI a la petición de un numeroso grupo de militares retirados que, de forma explicita "comprometen su contribución para revertir la peligrosa deriva en que se ha situado a nuestra Patria".

En su momento no dio respuesta inmediata a la carta y tampoco ha aprovechado la oportunidad del mensaje de navidad para hacerlo con mas calma. Ha perdido una oportunidad de oro para mejorar la maltrecha imagen de la monarquía.