En el balance semestral de fin de año, el presidente del gobierno Pedro Sánchez ha señalado su intención de agotar la legislatura hasta 2027.
Aunque el balance sea muy positivo, dadas las dificultades de aprobar leyes y presupuestos por la falta de mayorías, el propósito de agotar la legislatura no es sencillo, pues las dificultades del PP para conseguir los apoyos necesarios para presentar una moción de censura, ya que ningún partido democrático está dispuesto a una alianza que incluya a VOX, lo hace posible.
A las dificultades existentes se ha añadido la expulsión y renuncia por acoso sexual de un dirigente socialista de alto nivel que ha soliviantado tanto al PSOE como a todo el arco parlamentario aunque, dado que el machismo es un mal endémico en España, casi todos los grupos tienen que avergonzarse de casos de este tipo que intentan ocultar o justificar de la forma que pueden.
La aparición de una denuncia de hace cuarenta años contra el ex- presidente del gobierno Adolfo Suarez, ha puesto sobre la mesa que el problema de los abusos sexuales realizados por hombres poderosos sobre mujeres jóvenes, incluso menores de edad, es histórico y, afortunadamente, parece que algo se ha avanzado en este tiempo pues ya no se necesitan 40 años para poder denunciarlo. En cualquier caso todavía queda mucho camino por recorrer.
El asunto de los abusos sexuales se ha sumado al de la corrupción de Abalos y S. Cerdán que lleva ya algunos meses en primer plano de la actualidad.
Del mismo modo que el machismo, la corrupción también tiene un caracter histórico y afecta también a políticos y gente poderosa de muchos ámbitos.
En todo caso y teniendo en cuenta el alto grado de crispación y la estrategia del PP a disparar contra todo lo que se mueve con todos los medios a su alcance, hay que poner en su justo lugar el escándalo de fin de mundo que se está montando, máxime cuando los que mas se rasgan las vestiduras son los que más tienen que callar en estos asuntos.
Las hipérboles de la derecha no deben restar importancia a la creciente gravedad de la situación que está provocando también críticas entre los aliados del gobierno que empiezan, con razón, a pedir medidas para revertir la situación.
El gobierno está pidiendo tranquilidad pero tiene que empezar a tomar medidas inmediatamente pues todos estos temas están tapando los grandes progresos que se han hecho en estos años.
En relación al machismo y la corrupción hay que intensificar las medidas existentes y, sobre todo, poner los medios necesarios para poderlas aplicar con eficacia. Estas medidas deben afectar no solo al PSOE sino también a todas las entidades empresariales y sociales, no solo a los partidos políticos y ser propuestas y aprobadas en el congreso, aunque la experiencia demuestra que las derechas encontraran algún pretexto para votar en contra.
Entre tanto en esta segunda parte de la legislatura el gobierno debe seguir haciendo lo que sabe hacer: GOBERNAR como hasta ahora, pero poniendo más énfasis en el área de la vivienda que es el tema más crítico en este momento y hacer todos los esfuerzos posibles para aprobar unos presupuestos para lo que se necesita negociar con JUNTS y con Podemos que, aunque no sea tarea fácil, tiene que ser posible pues ambos grupos tienen mucho más que ganar con un acuerdo que sin él con un gobierno de las derechas.
La vuelta de un Puigdemont amnistiado puede ser el momento adecuado para que estas negociaciones prosperen.
Entre tanto el PP ha preparado un camino lleno de convocatorias electorales con el objetivo de aprovechar las debilidades de la izquierda y consolidar su liderazgo en la derecha.
La primera etapa en Extremadura les ha salido más mal que bien pues, aunque han conseguido sumar un escaño más, han perdido votos y han aumentado su dependencia de VOX.
Esta derrota relativa del PP no puede ni debe ocultar la enorme perdida de votos y diputados que ha tenido el PSOE debido tanto a las deficiencias del candidato presentado, como a la pérdida de influencia que sufre el PSOE por las causas descritas anteriormente y por la gran capacidad de comunicación y los enormes medios que es capaz de desplegar que tiene la derecha que consigue amplificarlas hasta limites insospechados al mismo tiempo que consigue que sus propios comportamientos de machismo y corrupción y su falta total de programa político queden difuminados.
Como primera conclusión hay que admitir que el vencedor real en Extremadura ha sido VOX y, como único dato positivo, el fuerte crecimiento de los grupos de izquierda que han conseguido un resultado muy positivo con una receta sencilla: Una buena candidata, una lista única de los dos grupos dominantes en el territorio, IU y Podemos, mientras que Sumar, que tiene poco peso en Extremadura, se ha quedado prudentemente en segundo término.
La siguiente etapa electoral es Aragón y en estas elecciones el PP lo tiene mucho más difícil por las siguientes razones:
- La candidata del PSOE, Pilar Alegría, es mucho más potente que el candidato extremeño.
- En Aragón la composición del parlamento es mucho más compleja, con 8 partidos representados, 3 de derechas, 4 de izquierda y Teruel Existe que ya ha sido el partido mas votado en Teruel en otras ocasiones.
- Si los 3 partidos a la izquierda del PSOE, Podemos, IU y Chunta, son capaces de segur el ejemplo de Extremadura podrían aumentar su representación en 3 escaños, llegando hasta 7 lo que podría permitir, en el mejor de los casos, un equilibrio entre la derecha y la izquierda y que el partido de la España vaciada tuviera el papel de arbitro de las elecciones lo que definiría un escenario nuevo muy diferente a un gobierno PP-VOX.

No es sencillo. Pero tampoco imposible. Lo importante es que Pedro Sánchez aguante y acabe la legislatura. Estoy seguro que el PP y Vox van a cometer errores en este año y medio que queda por delante.
ResponderEliminarLas elecciones municipales y autonómicas se rigen por normas distintas a las generales. Esto lo demostró bien claro Pedro Sánchez en las pasadas elecciones. El PP se está equivocando con esta serie de convocatorias previstas. Los electores socialistas descargarán su cabreo mediante la abstención y volverán a votar PSOE en las próximas generales en cuanto éste maneje adecuadamente los tiempos y los temas.
ResponderEliminarEl verdadero problema se presenta en la abundancia de cabezas de ratón que pueblan la izquierda del PSOE. Si estos partidillos supieran agruparse en una única opción, tras una sola dirección, y ser capaces de competir con Vox en número de diputados, tendríamos nuevamente un gobierno progresista por largo tiempo.
Mientras el PP necesite a Vox, el PNV y JUNTS tienen muy difícil apoyarle. Agradezcamos la existencia de un Vox fascista mientras dure.
Miguel Aznar