La reciente abdicación del Rey, cediendo la corona al Príncipe de Asturias, es una buena ocasión para reflexionar sobre el papel que ha tenido en España la monarquía, instaurada hace casi cuarenta años.
Aunque la institución monárquica pueda considerarse anacrónica, y yo así la considero, ha sido capaz de adaptarse a los tiempos actuales y sobrevivir en un mundo en el que predominan las repúblicas como forma de gobierno.
Monarquías europeas como la Británica, la Holandesa, la Belga, la Sueca, la Noruega, la Danesa o la Española, son perfectamente comparables en nivel democrático a cualquier república occidental. En España, ademas, la monarquía ha sido el vehículo que nos ha sacado de cuarenta años de dictadura franquista, ciertamente acompañada del empuje de los partidos y sindicatos democráticos y de la gran mayoría de la población.
La Ley Orgánica que convalidara la abdicación del Rey, es un tramite obligado para sustituir al Jefe de Estado, que simboliza de forma clara la supeditación de la monarquía al poder democrático:
El Rey no puede abdicar por si solo, necesita el acuerdo de las Cortes Generales.
Aprovechando esta circunstancia, algunos grupos ciudadanos, apoyados por partidos políticos emergentes, piden, casi exigen, la celebración de un referéndum para convalidar la monarquía y constituir la tercera República.
Sorprende que entre estos partidos este IU, teniendo en cuenta que el PCE participo activamente en la elaboración de la Constitución de 1978 y que voto a favor de la misma y que, antes de ella, su líder histórico Santiago Carrillo fue el primero que reconoció, bastante antes que el PSOE, a la corona, en un acto publico todavía clandestino, celebrado en la calle Alameda al que tuve la oportunidad de asistir y que, para sorpresa de todos, estuvo presidido por la bandera bicolor.
¿Que sentido tienen las declaraciones de Cayo Lara diciendo, de forma totalmente demagogica, que el pueblo tiene el derecho de elegir entre monarquía y democracia? ¿Que argumentos tiene este dirigente para dudar de que en la España de 2014 haya democracia?
Hacer un referéndum ahora supone coger un atajo innecesario, tan poco viable como el que proponen los partidos nacionalistas en Cataluña.
Un referéndum consultivo seria una trampa mas bien burda, pues si saliese a favor de la República, situación bastante improbable, sus promotores exigirían inmediatamente que se cumpliera la voluntad del pueblo y que el referéndum fuera decisorio.
Aunque algunos pretendan ignorarlo, España es un Estado de derecho que tiene tenemos mecanismos legales suficientes para reformar la constitución de 1978 y convertir España, si así lo decide el pueblo, en una República. Por otra lado ya hay suficientes motivos para reformar la constitución y una propuesta republicana seria un elemento mas a considerar, creo que ni siquiera el mas importante, aunque seguramente si el mas mediático.
La pregunta es si plantear en la próxima propuesta de reforma constitucional, la instauración de la III República, que seguramente tendría unos costes políticos y sociales muy altos, seria necesario, aunque desde luego, tiene lógica plantear esta pregunta coincidiendo con al jubilación del Rey Juan Carlos.
Un análisis del papel que ha tenido la monarquía parlamentaria en los últimos 36 años, necesario antes de hacer un planteamiento republicano, revelaría que ha traído a España muchos mas beneficios que desventajas, a pesar de los malos ejemplos personales, no políticos, del rey y de la presunta corrupción de algunos miembros de su familia.
El tramite parlamentario que hay que realizar antes de la proclamación del nuevo Rey, no impide ninguna acción posterior y votar en contra, como parece que va a hacer IU, supondría negar la abdicación y que, por tanto, Juan Carlos siga siendo el Rey. Otra contradicción mas de IU.
Aunque la institución monárquica pueda considerarse anacrónica, y yo así la considero, ha sido capaz de adaptarse a los tiempos actuales y sobrevivir en un mundo en el que predominan las repúblicas como forma de gobierno.
Monarquías europeas como la Británica, la Holandesa, la Belga, la Sueca, la Noruega, la Danesa o la Española, son perfectamente comparables en nivel democrático a cualquier república occidental. En España, ademas, la monarquía ha sido el vehículo que nos ha sacado de cuarenta años de dictadura franquista, ciertamente acompañada del empuje de los partidos y sindicatos democráticos y de la gran mayoría de la población.
La Ley Orgánica que convalidara la abdicación del Rey, es un tramite obligado para sustituir al Jefe de Estado, que simboliza de forma clara la supeditación de la monarquía al poder democrático:
El Rey no puede abdicar por si solo, necesita el acuerdo de las Cortes Generales.
Aprovechando esta circunstancia, algunos grupos ciudadanos, apoyados por partidos políticos emergentes, piden, casi exigen, la celebración de un referéndum para convalidar la monarquía y constituir la tercera República.
Sorprende que entre estos partidos este IU, teniendo en cuenta que el PCE participo activamente en la elaboración de la Constitución de 1978 y que voto a favor de la misma y que, antes de ella, su líder histórico Santiago Carrillo fue el primero que reconoció, bastante antes que el PSOE, a la corona, en un acto publico todavía clandestino, celebrado en la calle Alameda al que tuve la oportunidad de asistir y que, para sorpresa de todos, estuvo presidido por la bandera bicolor.
¿Que sentido tienen las declaraciones de Cayo Lara diciendo, de forma totalmente demagogica, que el pueblo tiene el derecho de elegir entre monarquía y democracia? ¿Que argumentos tiene este dirigente para dudar de que en la España de 2014 haya democracia?
Hacer un referéndum ahora supone coger un atajo innecesario, tan poco viable como el que proponen los partidos nacionalistas en Cataluña.
Un referéndum consultivo seria una trampa mas bien burda, pues si saliese a favor de la República, situación bastante improbable, sus promotores exigirían inmediatamente que se cumpliera la voluntad del pueblo y que el referéndum fuera decisorio.
Aunque algunos pretendan ignorarlo, España es un Estado de derecho que tiene tenemos mecanismos legales suficientes para reformar la constitución de 1978 y convertir España, si así lo decide el pueblo, en una República. Por otra lado ya hay suficientes motivos para reformar la constitución y una propuesta republicana seria un elemento mas a considerar, creo que ni siquiera el mas importante, aunque seguramente si el mas mediático.
La pregunta es si plantear en la próxima propuesta de reforma constitucional, la instauración de la III República, que seguramente tendría unos costes políticos y sociales muy altos, seria necesario, aunque desde luego, tiene lógica plantear esta pregunta coincidiendo con al jubilación del Rey Juan Carlos.
Un análisis del papel que ha tenido la monarquía parlamentaria en los últimos 36 años, necesario antes de hacer un planteamiento republicano, revelaría que ha traído a España muchos mas beneficios que desventajas, a pesar de los malos ejemplos personales, no políticos, del rey y de la presunta corrupción de algunos miembros de su familia.
El tramite parlamentario que hay que realizar antes de la proclamación del nuevo Rey, no impide ninguna acción posterior y votar en contra, como parece que va a hacer IU, supondría negar la abdicación y que, por tanto, Juan Carlos siga siendo el Rey. Otra contradicción mas de IU.